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Bahía de Ítaca

mas agua en el vino / antonio regalado

   Contra el agua y contra el vino. He aquí las dos últimas líneas rojas que ha traspasado el gobierno de la Nación.  No contento con derogar el Plan Hidrológico Nacional que ha enfrentado a socialistas y populares de Aragón y de Castilla-La Mancha con populares y socialistas de Valencia y Murcia; no satisfecho con haber volcado el Estatut sobre  la Carta Magna del 78 y tras la denuncia de José Blanco contra los organizadores de la manifestación del 3-F en Madrid, el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno encara la campaña electoral de finales de mayo –festividad de San Agustín de Carterbury- con dos frentes abiertos en canal: el del agua y el del vino.    

 Zapatero ha decidido ‘nacionalizar’ los manantiales. Las embotelladoras, en especial las de agua mineral natural (con y sin gas), han advertido al Ejecutivo que agitar el ambiente terminará repercutiendo en los bolsillos del consumidor y que afectará de lleno a las inversiones del sector. Los catalanes (Grupo Danone y Vichy Catalán), con casi el 40 por ciento de cuota de mercado, temen que la imagen saludable de sus aguas se vea enturbiada en la competitividad y en las exportaciones. Hay ‘aguas’ exclusivas en restaurantes de  Tokio y Nueva York que compiten con los mejores caldos de Burdeos.  El negocio del agua embotellada mueve al año 1.200 millones de euros y emplea a 5000 personas. En un tiempo de sequía, el agua envasada podría duplicar su precio este verano.     

Con o sin trasvases, las guerras del vino y del agua pueden deparar victorias y derrotas nacionales con dramáticas repercusiones  a corto y medio plazo. Y no nos referimos, lógicamente, a las bodas de Canaá, que recoge el evangelio de San Juan. Aquel primer milagro de Jesús no explica racionalmente por qué se transformó el agua en vino para dárselo a unas cuantas personas que ya estaban ebrias o, al menos, aturdidas con vino peleón. No, el presidente castellano-manchego, José María Barreda, ha arrancado a Zapatero la promesa de que el vino no se ‘picará’ tras la OCM de Bruselas y la Ley contra las bebidas alcohólicas que prepara la ministra de Sanidad. ¿Cómo conjugar ésta promesa con el texto del anteproyecto en el que se considera al vino “como bebida alcohólica” y, por tanto, siguiendo las directivas de la Unión, se limitan seriamente la promoción, la publicidad y el patrocinio? Los populares que mandatan comunidades vinateras, (Herrera, Pedro Sanz y Valcárcel se plantaron en Ciudad Real –vía AVE- con Rajoy a la cabeza para defender el vino ante 5000 viticultores llegados de toda CLM para apoyar a la candidata a la Junta, Maria Dolores de Cospedal. En la mitad de la Mancha declararon la guerra conjunta a Elena Salgado y a Zapatero porque el vino –la cultura del vino-  es una cosa muy seria,  tomada con moderación, Los del cava catalán, los sidreros asturianos y los criadores de manzanilla en el sur, esperan una rectificación. A este paso el otoño se adelantará a la primavera.       

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