blindarse en moncloa / antonio regalado

El Estatut ha quedado visto para sentencia. Será el pueblo catalán quien lo ratifique el 18 de junio. No importa que haya salido del Senado con el 49 por 100 de los votos  ni que el porcentaje de abstenciones, nulos y noes, supere a los que digan sí. Zapatero y Mas compartirán mítines conjuntos para neutralizar a Maragall y Carod que sueñan aún con reverdecer el error del tripartito; reinventarán el  PRI social-convergente.  El gobierno CiU-PSC, con un Artur Mas moderando el cambio desde la Generalitat será la mejor carta de presentación para que el presidente se desligue de su compromiso número uno y se centre en el segundo, ETA. No olvidemos que Zapatero es el mayor activo socialista en Cataluña; en este momento es el político más valorado, muy por encima del Honorable President. 

Cualquier observador sabe que este Ejecutivo de la Nación va trasladando los problemas de lugar y de tiempo pero que estallarán  más pronto que tarde. ¿Alguien puede imaginar el desenlace de un escenario a dos  años vista, con un desarrollo estatutario de difícil interpretación o cepillado más aún por el TC? 

Pero Rodríguez Zapatero  el día después del referéndum dirá que ése es un problema resuelto. Y a pasar página.  Tras torear el Plan Ibarretxe en las Cortes, con la inestimable colaboración del PP, ZP se enfrenta ahora al morlaco de los etarras que en las últimas horas han dejado bien claro que los presos, la autodeterminación y la territorialidad no son negociables. Mientras Sarkozy asegura que allí no han parado su actividad, Rubalcaba certifica en el tercer informe que “estamos en el camino correcto”.  Y dos huevos duros.    

No hace falta ser un genio para comprender que las negociaciones ETA-Gobierno, con discreción o sin ella, van a seguir esta ruta: Uno.- No habrá muertos ni ‘kale borroka’ provocada y admitida por ETA hasta las elecciones españolas. (Entiéndase generales). Dos.- La premisa primera es la legalización de Batasuna (o un sucedáneo tipo PCTV) para que vuelva a los Ayuntamientos y a las Diputaciones Forales. (Nóminas, ya saben). Tres.- Acercamiento paulatino de los presos a prisiones del País Vasco. Cuatro.- Permisividad para que  las listas se ‘liberen’ y se 'democraticen` con militantes etarras que ya han cumplido  sus penas con la justicia y que quieren volver a casa. Cinco.- Acceso a puestos remunerados en las instituciones del Euskadi y Navarra (Tipo Udalbiltza.  Objetivo: ir reintegrando en la vida cotidiana a los más indomables, con cargos, seguridad social, etc… con vistas a jubilaciones anticipadas. Y seis.- De este modo, PSE y Batasuna llegarán a los comicios locales como los grandes impulsores de la paz.    

 La segunda fase, comenzaría tras los comicios generales en marzo de 2008. Prácticamente, la vida política quedaría concluida en diciembre del próximo año tras aprobar los PGE.  El apoyo de CiU es crucial tanto para apuntalar al Gobierno como para ningunear al PP.  En esa segunda fase, entraría ya la negociación política que ETA reivindica hoy desde “Gara”. ¿Cuáles son los puntos conflictivos? Sin duda, la autodeterminación, Navarra y el derecho a decidir de los vascos. Éste último es el aspecto más controvertido porque derivaría en un galimatías político-jurídico que seria mimetizado inmediatamente por los catalanes. “Si los vascos consiguen el derecho a decidir –y eso solo lo pueden conseguir con Zapatero- nosotros lo pediremos y si se disgrega el País Vasco y Cataluña, no va a quedar nada del Estado español en pocos años”.  La frase es del prohombre con más futuro en el Principado y catalanista que, lógicamente, piensa y siente el Estatut, pero el aprobado el 30 de septiembre.      

Así son las cosas y así se las hemos contado, que diría el florentino Buruaga.  Ante este panorama, lo más lógico y probable es que el presidente se blinde en La Moncloa para llegar como el gran campeón del proceso de paz a los próximos comicios generales.  Sabiendo que Mas no le presionará en el noreste y que Durán y Lleida se deshace por ser ministro –incluso de Marina- los cadáveres de ERC ya no le preocupan. Quiere presentarse a revalidar cargo como el campeón de la paz en el norte. Es decir, trabaja para blindar su futuro.  

Las detenciones ilegales de militantes del PP, los ‘cayucos’ que llegan a Canarias, Afinsa, Forum Filatélico, la Opa hostil contra Endesa, el procedimiento iniciado en Bruselas por proteccionismo y el desplante de Evo Morales, todo puede esperar.  ZP sigue viviendo en el País de Nunca Jamás. Igualito, oyes, que Peter Pan, acompañado, eso sí, de su particular "Campanella", la vice  Maria Teresa.