diagnóstico para un estdo menguante
El próximo martes, comienza el Debate sobre el Estado de la Nación. Un balance en el ecuador de la VIII Legislatura. Mientras ETA, el Estatut, Afinsa, Forum Filatélico, Marbella, el Archivo de Salamanca, los cayucos, las expropiaciones de Evo Morales y de Hugo Chávez en Bolivia y Venezuela, respectivamente; la juventud, el piso, el paro, y el asalto a las viviendas unifamiliares marcan la vida de los españoles, el Gobierno se deleitará contándonos milongas como la ampliación de los derechos civiles, la igualdad de género, los Planes Concilia y África o la creación de ese Centro de Inteligencia contra el crimen organizado, que el presidente se sacó de la chistera el pasado miércoles por la mañana, en el Senado, para calmar al representante de CiU, Pere Macias.
En esta edición, José Luís Rodríguez Zapatero, esperaba que el silencio de las pistolas de los terroristas le permitiera iniciar su andadura como nuevo "apóstol de la paz" del norte; pero, ese mago de la demagogia que es Arnaldo Otegui le ha roto los esquemas al presentarse en Navarra con sus "ilegales delegados" de toda Euskal Herría (menos Alava), dispuestos a iniciar una negociación en profundidad. No le falta razón: ¿cómo es que La Moncloa está dispuesta a dialogar con los etarras y no con Batasuna?
He seguido toda la trayectoria política del presidente desde el 11-M. Jamás le he visto comprometerse con nada ni con nadie. ¿Qué ha sucedido con la reforma del Senado? ¿Y con la igualdad en el acceso a la Corona? ¿Do fueron a parar las inclusiones de los nombres de las CCAA en la Carta Magna y la mención al espíritu de la Constitución Europea? De su discurso de investidura no queda nada. ¿A quien pretende engañar cuando hablar de resarcir a las víctimas reformando la Ley de Leyes? Nunca un dirigente tuvo tan buenas palabras y tan pocos hechos. Pero el marketing y la sonrisa le funciona.
La tensión a la que ha sometido este hombre a la sociedad española, primero con el rechazo del Plan Ibarretxe, después con el 'cepillado' del Estatuto de Cataluña, tercero con las negociaciones etarras y cuarto con el apoyo a las Opa de Gas Natural contra Endesa/E-On, no tiene parangón en nuestro entorno democrático europeo.
De política exterior, incluyendo el pulso a EEUU, mejor no hablar. El desprecio a las víctimas de la ATV, a las familias, a la Iglesia Católica, a los padres que desean que sus hijos reciban la asignatura de religión en los colegios públicos y a los 4,030 millones de firmas recogidas por el PP para que reflexione sobre la política territorial explica que su talante no es más que una máscara de hierro. Para más inri ha asestado el golpe de muerte a la Radio y TV públicas al desmantelar RNE y TVE desvertebrando y desarmando informativamente toda la sociedad española. ¿Sabremos alguna vez la verdad sobre el 11-M? Ya lo dije hace un mes: con Rubalcaba en Interior, jamás. No nos merecemos este gobierno, ciertamente; pero la oposición del PP -errática, inconsistente, sin pegada, resignada, mansurrona y acomplejada- tampoco. Rajoy, excelente parlamentario de salón, no da la talla en los momentos difíciles. Los 18.000 millones de superávit en las cuentas públicas lo van a tapar todo.
El PSOE ha pactado el futuro con los nacionalistas (con prisa), tras traicionar a ERC y a los demás que nos vayan dando. Toda la fiolosofia es llegar a la meta de los comicios generales de 2008 como el 'campeón de la paz'. Al año siguiente, cuando se desarrollen los Estatutos catalán y andaluz, habrá que pagar las letras firmadas porque esto no es gratis. ¿Tendrá alguien valor para hablar en el hemiciclo de valores, deberes, unidad y esfuerzo colectivo? ¿Escucharemos alternativas al PHN (qepd)? ¿Alguien tendrá 'trillos' para pedir cancelación de la moratoria nuclear? La respuesta es no. Ya verán: si con Aznar 'España iba bien', con Zapatero 'nos salimos'. ZP imparable. Nos espera el Mundial de Alemania y luego… las vacaciones. Esto es Jauja
En esta edición, José Luís Rodríguez Zapatero, esperaba que el silencio de las pistolas de los terroristas le permitiera iniciar su andadura como nuevo "apóstol de la paz" del norte; pero, ese mago de la demagogia que es Arnaldo Otegui le ha roto los esquemas al presentarse en Navarra con sus "ilegales delegados" de toda Euskal Herría (menos Alava), dispuestos a iniciar una negociación en profundidad. No le falta razón: ¿cómo es que La Moncloa está dispuesta a dialogar con los etarras y no con Batasuna?
He seguido toda la trayectoria política del presidente desde el 11-M. Jamás le he visto comprometerse con nada ni con nadie. ¿Qué ha sucedido con la reforma del Senado? ¿Y con la igualdad en el acceso a la Corona? ¿Do fueron a parar las inclusiones de los nombres de las CCAA en la Carta Magna y la mención al espíritu de la Constitución Europea? De su discurso de investidura no queda nada. ¿A quien pretende engañar cuando hablar de resarcir a las víctimas reformando la Ley de Leyes? Nunca un dirigente tuvo tan buenas palabras y tan pocos hechos. Pero el marketing y la sonrisa le funciona.
La tensión a la que ha sometido este hombre a la sociedad española, primero con el rechazo del Plan Ibarretxe, después con el 'cepillado' del Estatuto de Cataluña, tercero con las negociaciones etarras y cuarto con el apoyo a las Opa de Gas Natural contra Endesa/E-On, no tiene parangón en nuestro entorno democrático europeo.
De política exterior, incluyendo el pulso a EEUU, mejor no hablar. El desprecio a las víctimas de la ATV, a las familias, a la Iglesia Católica, a los padres que desean que sus hijos reciban la asignatura de religión en los colegios públicos y a los 4,030 millones de firmas recogidas por el PP para que reflexione sobre la política territorial explica que su talante no es más que una máscara de hierro. Para más inri ha asestado el golpe de muerte a la Radio y TV públicas al desmantelar RNE y TVE desvertebrando y desarmando informativamente toda la sociedad española. ¿Sabremos alguna vez la verdad sobre el 11-M? Ya lo dije hace un mes: con Rubalcaba en Interior, jamás. No nos merecemos este gobierno, ciertamente; pero la oposición del PP -errática, inconsistente, sin pegada, resignada, mansurrona y acomplejada- tampoco. Rajoy, excelente parlamentario de salón, no da la talla en los momentos difíciles. Los 18.000 millones de superávit en las cuentas públicas lo van a tapar todo.
El PSOE ha pactado el futuro con los nacionalistas (con prisa), tras traicionar a ERC y a los demás que nos vayan dando. Toda la fiolosofia es llegar a la meta de los comicios generales de 2008 como el 'campeón de la paz'. Al año siguiente, cuando se desarrollen los Estatutos catalán y andaluz, habrá que pagar las letras firmadas porque esto no es gratis. ¿Tendrá alguien valor para hablar en el hemiciclo de valores, deberes, unidad y esfuerzo colectivo? ¿Escucharemos alternativas al PHN (qepd)? ¿Alguien tendrá 'trillos' para pedir cancelación de la moratoria nuclear? La respuesta es no. Ya verán: si con Aznar 'España iba bien', con Zapatero 'nos salimos'. ZP imparable. Nos espera el Mundial de Alemania y luego… las vacaciones. Esto es Jauja
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