El único camino / antonio regalado

     La decisión de los populares de no acudir de ahora en adelante a las tertulias y entrevistas del Grupo Prisa, tras los insultos y descalificaciones de Jesús de Polanco era la  nunca salida digna que le quedaba a Rajoy. El secretario general Ángel Acebes ya ha redactado las condiciones para el acuerdo: que el magnate rectifique. No lo hará.  El Imperio (y sus satélites) no pueden admitir que dos millones de personas hayan tomado las calles de Madrid y de Pamplona para decir a Zapatero ¡basta ya¡ en su quimérica revolución territorial y su entreguismo a los etarras. El ondear de banderas nacionales y el himno fue demasiado. De un diario que no puede ser neutral puede esperarse incluso lo peor.  Herido en su honor acusa al PP de reverdecer el franquismo y el guerracivilismo. Mentiras. El buque insignia pierde lectores y credibilidad. El negocio se resiente. La respuesta es la expulsión a las tinieblas  de Herman Tersch por no comulgar con la verdad oficial prisaica y relamerse en el victimismo. No cuela. El PSOE ha boicoteado La Razón, la COPE y Telemadrid y el PP está en su derecho de no acudir como invitado a una casa que le maltrata. La crispación es producto de un gobierno débil que cree que el café cuesta 80 céntimos todavía. Lo grave, que se deterioren la libertad y la democracia. Pero, sinceramente, el PP no tenía otro camino.